Viaje en tren

Para volver a Vietnam nos hicimos mas kilometros que la comparacion tipica graciosa que ahora no nos sale. Salimos desde Phnom Penh en autobus hasta Ho Chi Minh City, con sus correspondientes 7 horas sentados y el conazo de pasar la frontera.
Aprovecho esto para hablar un poco de los autobuses, ya que se puede decir que somos expertos usuarios. Torturan al viajero sometiendolo a cambios de temperaturas extremas, quitan y ponen el aire acondicionado cuando les apetece, tambien se sufre torturas auditivas, ya que el conductor pita continuamente, aunque no haya nadie en la carretera. Estos buses son del ano de la polka, asi que el respiradero del motor sale a los ultimos cinco asientos del bus, lugar donde nos encanta ponernos, o nos pone la dependienta de turno. Entonces tienes las piernas a 60 grados mientras el aire acondicionado te da en toda la almendra. Tambien un bache puede hacer que te des contra el techo, esto se incrementa en la zona de atras, nuestra zona favorita. Ademas no ponen pelis, sino karaokes, que nadie canta.
Pasamos una tarde tranquila en Ho Chi Minh, paseando en las callejas donde viven los vietnamitas. La gente de aqui hace todo en la calle, cocinan, comen, se sientan y es bastante bonito de ver este tipo de barrios. Queremos recalcar que la gente de Vietnam es especial, y aunque nos pasara algo, nos llevaremos un gran recuerdo de ellos. Esto lo digo porque en otros blogs hemos visto que hablaban mal de la gente de aqui, cuando estoy aun esperando a ver un ejemplo.
A las 11 de la noche cogimos el Tren Expreso de Reunificacion, que une las capitales de los antiguos Vietnam del Sur y del Norte. Teniamos 15 horas hasta Danang.
Recomendamos hacer estos viajes por la noche, ya que ganas tiempo porque viajas mientras duermes, y aunque sea mas caro que el autobus merece la pena. Pudimos ver como cambia el paisaje vietnamita y tuvimos la experiencia de compartir un compartimento al mas puro estilo de pelis de trenes. Digo compartimento cuando podia ser zulo, ya que eramos cuatro en una habitacion de 2x2, aunque nos adaptamos perfectamente, y tampoco es de merito ya que al lado estaban 6 en un compartimento. Esta gente hizo presion demografica y se adueno de la ventana del vagon todo el viaje. Ademas los ultimos kilometros pudimos ver los destrozos e inundaciones cuasados por el tifon que ha recorrido esta zona. Al llegar a Danang, teniamos que ir a Hoi An, al final optamos por un taxista clandestino con el que no hubo ningun problema, ademas era todo un experto guia, meteorologo y consejero.

P.D. En la foto aparece una de las calles interiores de Ho Chi Minh city, se puede apreciar lo pegados que estan los edificios (no es un tunel, son dos balcones pegados).